lunes, 22 de agosto de 2011

Creo que día a día tenemos que tomar la decisión de seguir lo que dice la Palabra o lo que dice nuestra mente. Se vuelve un poco difícil esa decisión cuando empezamos a darle espacio a nuestra mente. Es así como nos dejamos engañar, pensando que estamos haciendo bien en no seguir lo que Dios dice. Tal vez incluso nos hacemos creer que sí estamos siguiendo el plan de Dios, solo que es un plan alterno.

Lamentablemente no he tenido el tiempo de conversar con una amiga del grupo de jóvenes. Veo que llega, se sienta, escucha, se para y se va con otras personas del mismo grupo. Bueno, eso no es algo malo. El asunto es que ella está con un joven que no es cristiano.

"No se unan en matrimonio con los que no creen en el Señor,..." 2 Corintios 6:14 NBD

No se ustedes, pero que una persona este con otra persona no es para perder el tiempo, sino que la relación tienen un propósito y una de sus metas debe ser el matrimonio.

Esta amiga ha estado un buen tiempo en la iglesia, ha ido a estudios, campamentos, etc., y he visto su compromiso... pero -como sucede con varias personas- luego tomó una decisión... puaj!
POR QUÉ SUCEDE ESTO CON VARIAS PERSONAS?
Sencillo, el diablo empezó a mentirles y hacerles creer que ese era el plan alternativo de Dios. Que el "amor" es más grande que 2 Corintios 6:14 y que todo va a estar bien. Si, claro (tono sarcástico).

Bueno, gracias a Dios porque podemos decidir por nuestra cuenta, y así como a veces nos metemos en líos solitos, así mismo podemos salir de ellos. Pero eso requiere más valor.
¿Tienes el valor de seguir a Dios?

Si debes terminar algo, cortar algún asunto, algún vicio o lo que sea, vas a ver qué tan determinante es que lo decidas. Vas a tomar una decisión firme o una decisión mediocre?

Ten por seguro que Dios está contigo siempre, confía en El y vive en esa confianza. Seguro de lo que crees y seguro del plan que tiene para ti, no de planes alternos.

lunes, 15 de agosto de 2011

////

Las frases "tengo sueño", "estoy cansado", "no estoy animado", etc... puede que sean más que solo frases en nuestras vidas. Puede que sean excusas.

Podemos usarlas para muchas cosas, pero algo 'típico' que puedo escuchar en varias personas que no congregan (asisten y participan activamente en su iglesia local) es que 'tienen sueño', 'están cansados cuando salen de trabajar', o porque simplemente se despertaron y 'no estaban animados'.

Sé que hay distintos tipos de trabajo, pero también sé que es mucho mejor tener las prioridades en orden. Cada decisión que tomamos tiene un fruto. Si el trabajo está por encima de la iglesia, eso también va a tener su fruto. No te digo que tienes que ir de lunes a domingo y que tienes que estar mínimo desde las 9am apoyando en todo lo que se necesite. Pero el congregar debe ser una de tus prioridades, punto.

Por el otro lado, por qué rayos esperas a tener ánimos para ir? Se nota que los sentimientos y los ánimos te dominan, y lo que dices creer se queda en un segundo plano. Es la verdad.

Si me dices, o te dices a ti mismo(a) que crees en algo, entonces que así sea, vive de acuerdo a eso. Si no estas animado(a), qué importa, tus principios son tus principios.

Tal vez me preguntes, por qué escribo tanto de este tema? Bueno, porque sé que día a día las no ganas de ir, de apoyar o de seguir tus principios estan presentes... bueno, que también este presente la Palabra de Dios.

viernes, 12 de agosto de 2011

////

Vaya, creo que en algún momento de nuestra vida hemos recibido o dado un consejo a alguien. El consejo pudo ser bueno o malo. Pero... ¿de qué depende?

Sencillo, de donde viene el consejo. Ja! creo que muchos dirían.. "De mi inteligencia para dar buenos consejos" Bah, si, claro... lo que tú digas...

De verdad hay algún secreto para dar un buen consejo? La verdad es que no es un secreto, pero muchos no le quieran dar valor.

¿Qué pasaría si estoy frente a ti, saco una pistola y te disparo en la cabeza? Obvio, hay un 99.9%
de probabilidades que mueras. ¿Eso te parece que está mal? Pues, obvio! (puede que respondas).

¿Por qué está mal? ¿Porque eres una persona, porque la ley lo dice, porque tu mamá lo dice?

He visto a lo largo de mi vida, que los mejores consejos tienen como ingrediente principal: lo que Dios ha dicho.

A veces no te has quedado callado cuando un amigo fue a ti, porque sencillamente no sabías qué decirle? Bueno, a mi me ha pasado y la verdad que es feo. Por el simple hecho que no tienes nada dentro de ti que lo pueda ayudar en ese momento. Pero, hey! la lógica sería ir a la Palabra de Dios, y qué mejor consejo que lo que Dios dice sobre esa situación o circunstancia.

¿Qué abunda en tu corazón? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. Si en tu corazón está lo que Dios ha dicho, entonces te aseguro que puedes dar los mejores consejos.

Muy aparte de bendecirte tú mismo al leer tu Biblia, te estas capacitando para bendecir a los demás. ¿Quiéres ser una bendición o una maldición a los demás? ¿Quiéres ser capaz de poder darles lo mejor a tus amigos (el amor de Dios)?

martes, 9 de agosto de 2011

////

Bueno, a lo que me refiero es que a veces dejamos de lado nuestra relación con Él. Ya no hablamos con Él, ya no leemos Su Palabra, ni nada de nada.

La verdad es que creo que a todos nos ha pasado en alguna oportunidad, ya sea un día, una semana, un mes, derrepente todavía lo tenías olvidado.

No estoy escribiendo esto para condenarte ni hacerte sentir culpable de nada. El asunto aquí es ver la otra parte: el lado de Dios.

Bueno, creo que eso es lo mejor de todo, no importa si nos olvidamos de él, si lo dejamos de lado porque pensamos que lo que nosotros queremos es 'lo mejor' para nuestras vidas, o lo que sea, Él siempre va a seguir contigo. Él es fiel en todo tiempo.

Algunos pueden estar pensando en sacar provecho de su fidelidad y seguir lo que estaban haciendo, pero esa es una mal interpretación del amor de Dios. Él nos ama tanto que no se mueve por lo que hacemos, Él es amor.

No debemos esperar a estar en una situación difícil para recien acordarnos de Dios y de que podemos hablarle. Disfruta de tu relación con Dios en todo tipo de días, ya que cuando llegue una circunstancia, vas a estar tan acostumbrado a escuchar a Dios, que vas a poder tomar control de la circunstancia sin ningún problema.

Con Dios nada es imposible. Como escuché en una película: "Si ganamos le alabamos, si perdemos le alabamos". No importa cómo te sientas, habla con Él y disfruta de tu relación.

martes, 2 de agosto de 2011


Podemos decir que vamos a la iglesia mínimo una vez a la semana, apoyamos en algún área de la iglesia, siempre estamos con una sonrisa y listos para bendecir a los demás, etc y etc.

Pero... cuánto de eso es una realidad en tu vida?. Tal vez seas una persona tranquila, que lee su biblia de vez en cuando y evita hacer cosas malas y juntarse con personas que van a influenciarte negativamente.

Días Blancos y Días Negros

Hace poco estaba con un amigo y le pregunté cómo estaba, él me respondió: "Siempre estoy bien". En un sentido, la respuesta puede sonar recontra espiritual positivamente. Pero por otro lado, la respuesta puede ser a la vez muy vacía.

¿Por qué?

A veces nos confundimos y pensamos que debemos estar siembre bien, y si nos sentimos mal, solo debemos decir que estamos bien por si alguien pregunta. Muchas veces, esas personas terminan solas porque se cierran y derrepente está pasando algo en sus vidas pero no lo expresan porque 'siempre deben decir que están bien'.

Por otro lado a veces dejamos que las circunstancias hagan de nuestro día, un día negro.

¿Qué podemos hacer al respecto?

Si sientes que debes compartir algo que está sucediendo en tu vida, hazlo, primero con Dios, con tus padres, con tus líderes y bueno, con los hermanos (amigos) en los que realmente confíes y sabes que te pueden guiar en una buena decisión. Siempre vamos a necesitar una guía, Dios puede hablarnos directamente o por medio de personas.

No lo olvides, no dejes que las circunstancias hagan tu día. Tú decide qué clase de día vas a tener y disfrútalo. Lo que confiesas o posteas en tu muro, es lo que hablas para tu vida. Es lo que influencias a otros a hablar.

Declara una semana excelente y sigue la guía de Dios.